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  • 10/03/2021 - 07:50  

    Bunny en la mesa de la doctora Cristina Ruano: análisis nutricional

    Al ser una de las carnes más bajas en contenido de grasa, y por su aporte en proteínas de alto valor biológico, la carne de conejo es una de las materias primas más apreciadas en la Dieta Mediterránea, tanto por sus propiedades nutricionales como por su sabor, aroma y textura; aunque esta última va a depender mucho, de su alimentación, del tipo de crianza y de la edad del animal en el momento del sacrificio.

    El componente mayoritario de su análisis nutricional es agua, que se encuentra en un 72 por ciento. Porcentaje que obviamente puede variar dependiendo de la raza y del tipo de dieta que haya tenido el animal. Los hidratos de carbono no se han encontrado en cantidades significativas y únicamente contine 130 kilocalorías por cada 100 gramos.

    CRISTINA

    Sin embargo, aporta entre 18 y 20 gramos de proteínas de alto valor biológico por cada 100 gramos. Recordemos que se califican “de alto valor biológico” a las proteínas que contienen todos los aminoácidos esenciales que el organismo necesita para su correcto desarrollo en las distintas etapas de la vida.

    Es una carne magra de bajo contenido en grasa y en colesterol y, en comparación con otras carnes, tiene una menor proporción de grasas saturadas, por lo que su perfil lipídico es bastante equilibrado, recomendable para personas que padezcan enfermedades cardiovasculares o, para quienes deseen realizar dietas de prevención de la obesidad.

    Al analizar su contenido en vitaminas, debemos destacar su riqueza en vitaminas del grupo B (B12, B3 y B6) y en vitamina E.

    Los seguidores de Locos por la Gastronomía, recuerdan perfectamente, que las vitaminas del grupo B están relacionadas con el correcto funcionamiento del cerebro y ayudan a evitar la depresión. Mientras que la vitamina E actúa como antioxidante, y ayuda a proteger las células de los daños producidos por los radicales libres y del envejecimiento celular.

    En cuanto a los minerales, la carne de conejo aporta importantes cantidades de hierro, fácilmente asimilable por el organismo, zinc y magnesio. El primero de ellos es imprescindible para el mantenimiento óptimo de la salud, pues ayuda al sistema inmunitario a combatir las bacterias y los virus.

    El magnesio por su parte, participa en el normal funcionamiento de músculos y nervios, mantiene constantes los latidos del corazón, Además apoya al sistema inmunitario y ayuda a que los huesos mantengan su fortaleza.

    Al tener bajo contenido en sodio, la carne de conejo es una muy buena opción para las personas que padecen de hipertensión arterial.  

    En el análisis de las necesidades nutricionales de la población en general, el consumo de esta carne está recomendado para todos los grupos de edad, tanto en la niñez y en la adolescencia como en la adultez. Pero de manera muy especial en aquellos grupos con necesidades proteicas elevadas, como las mujeres embarazadas o quienes practiquen deporte.

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    'El conejo me enriscó la perra': breve reseña sobre la historia de este animalito y su llegada a Canarias. 


    Dra. Cristina Ruano Rodríguez
    Especialista en comunicación y educación nutricional
    Twitter: @cristinaruanoR
    Instagram: @cristinaruanor    

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